Los análisis forenses revelaron que la menor Valeria Afanador aspiró e ingirió agua y residuos de pantano que fueron encontrados en su estómago y vías respiratorias.
La Fiscalía General de la
Nación está investigando las circunstancias de la muerte de una niña de 10 años
en Cajicá, Cundinamarca. El cuerpo de la menor, que había sido reportada como
desaparecida el 12 de agosto, fue encontrado 17 días después en el río Frío. El
Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses ha entregado un
informe clave a la Fiscalía con las primeras conclusiones de la necropsia.
Según el informe de Medicina
Legal, la niña murió por ahogamiento. Los análisis forenses revelaron que la
menor aspiró e ingirió agua y residuos de pantano que fueron encontrados en su
estómago y vías respiratorias. Además, el cuerpo presentaba adipocira, una
sustancia que se forma cuando un cuerpo está en contacto con agua y materiales
biológicos en descomposición, lo que confirma que la niña estuvo en un entorno
pantanoso de forma prolongada.
Los expertos forenses también
indicaron que los fenómenos cadavéricos observados en el cuerpo son
consistentes con la fecha de desaparición. Esto significa que la muerte ocurrió
en un periodo cercano a la última vez que la niña fue vista con vida, el 12 de
agosto.
Sin signos de violencia
física
El informe también destaca que
no se encontraron signos de violencia física en el cuerpo de la menor. Las
prendas de vestir que llevaba la niña tampoco presentaban desgarros ni cortes.
La Fiscalía continuará con la
investigación para esclarecer los hechos, y Medicina Legal seguirá realizando
estudios adicionales con las muestras de laboratorio. El caso permanece bajo la
lupa de las autoridades para determinar las circunstancias exactas que llevaron
a esta trágica muerte.
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