Al Hospital Departamental San
Antonio de Pitalito lo entro a administrar la dinastía de las Dianas. La
saliente, muy criticada Diana Victoria Muñoz, y a partir de 1 de abril de 2024
su mano derecha, la también médica Diana Marcela Conde Martín.
Fuentes no oficiales dan fe que
Muñoz continuará gerenciando, influenciado el destino del segundo hospital más
importante del departamento del Huila bajo la sombra, situación que puede dar continuidad
a una serie de prácticas objeto de denuncia por funcionarios y directivos sindicales, temas como acoso y maltrato laboral, el
alquiler de fotocopiadoras, y el monopolio en el suministro de la comida para
los pacientes hospitalizados, además de la tercerización en la contratación del
personal.
También la pésima atención que
se presenta en el servicio de urgencias, todo por cuenta del hacinamiento, y lo
paquidérmico que resulta para algunos pacientes pasar por esa unidad, donde
reportan que falta más oportunidad y calidad.
A la designada gerente Diana Conde,
le quedan como tareas: sentarse a manteles con los directivos del sindicato y
llegar a acuerdos puntuales, que deben redundar en mejores garantías para el
ejercicio de funciones de los trabajadores a su cargo, fomentar el
buen ambiente laboral, y por sobre todas las cosas, la humanización, buena atención de los usuarios.
También lograr la ampliación y
modernización del servicio de urgencias, ampliar la capacidad instalada
de la Unidad Pediátrica, la ampliación de la Unidad de Urgencias, la
construcción de cinco (5) nuevas Salas de Cirugía, la ampliación y remodelación
del Laboratorio Clínico y Banco de Sangre, dotación de cuatro (4) ambulancias y
dotación de equipos biomédicos (TAC, RMN, UCI Adultos) para que estos servicios
no sean tercerizados, y fomentar formalización sacando a sombrerazos a las cooperativas que no han hecho otra cosa que desangrar los salarios y la capacidad adquisitiva de los trabajadores. Lo que fuera compromiso con el Ministro de Salud
Guillermo Antonio Jaramillo quien asigno para esos buenos propósitos una partida presupuestal de 23 mil millones de pesos.
Sobre esas metas está en sintonía el secretario de Salud del Huila Sergio Mauricio Zúñiga quien desde su posesión en el cargo viene hablando con mucha propiedad de fortalecer los hospitales departamentales que deben ser ejemplo por su atención y dotación, para garantizar la óptima prestación de los servicios, básicos y especializados.
En esa ardua tarea la Junta
Directiva del Hospital cumple un papel fundamental, pero deben dejar la manguala, ser convidados de piedra,
el haberse convertido comité de aplausos, y realmente ejercer con responsabilidad,
honor, el cargo para el cual fueron elegidos. No puede ser que la gerente es quien
les da las órdenes, y ellos como cuadros
directivos simplemente se dediquen a agachar la cabeza, a aprobar todo. Directivos que se hacen los de los oídos sordos, por conveniencia no escuchan las denuncias como si en el hospital no
estuviera pasando nada.
Si bien es cierto a la médica
Diana Victoria Muñoz le reconocen su gestión en cuanto a infraestructura
hospitalaria, sí dio mucho que decir por las quejas arriba expuestas que finalmente le
cobraron su continuidad en el cargo. Aunque como nos confirman seguirá gerenciando en cuerpo ajeno.
Buen viento y buena mar, la nueva gerente Diana… Conde, que ojalá no se le olvide que al jurar para posesionarse en dicho cargo se constituye en una servidora pública, garante de los servicios salud en conexidad con el derecho a la vida. El ser gerente del Hospital Departamental garantía para usuarios de Pitalito, sur del Huila, y departamentos cercanos como Cauca, Caquetá y Putumayo, ojalá el cargo no se le suba a la cabeza como le pasó a la pequeña emperadorcita.
No hay comentarios:
Publicar un comentario