Grave emergencia luego de las intensas lluvias que provocaron el desbordamiento del río Ambicá, y la afectación de la banca de la vía que comunica con esa municipalidad.
Las intensas precipitaciones que azotaron durante toda la noche al municipio de Colombia, al norte del Huila, lo han dejado incomunicado con la capital huilense. Según informes de los residentes locales, la crecida del río Ambicá ha provocado severos daños en una estructura clave en el área conocida como Mongui, específicamente en el sector de Las Torres. Este incidente ha dejado al municipio completamente aislado de la ciudad de Neiva, su principal centro de conexión y abastecimiento.
La ruptura de la estructura ha generado un corte total en las vías que comunican a Colombia con Neiva, dificultando el acceso de personas y mercancías hacia y desde la población afectada. Esta situación, además de representar un obstáculo logístico considerable, plantea serias preocupaciones en términos de atención de emergencias y acceso a servicios básicos para los habitantes.
Las autoridades han emitido advertencias sobre el incremento del caudal del río Ambicá, lo que ha llevado al cierre preventivo de las compuertas del acueducto. Esta medida, aunque necesaria para garantizar la seguridad de la infraestructura, ha dejado a la población de Colombia sin acceso al vital servicio de agua potable.
En respuesta a esta emergencia, se ha desplegado un equipo multidisciplinario de socorro, conformado por personal de defensa civil, bomberos y otros organismos de atención de emergencias, para evaluar los daños y coordinar las labores de ayuda y restablecimiento de servicios básicos. Sin embargo, las condiciones climáticas adversas siguen representando un desafío para las labores de recuperación.
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