El pasado miércoles 1 de mayo, un incendio estructural de grandes magnitudes devoró dos viviendas en el asentamiento Granjas Comunitarias, ubicado en la capital huilense. Las llamas, cuyo origen aún es un misterio para las autoridades y organismos de socorro, consumieron sin piedad las casas construidos a base madera y zinc, dejando a dos familias sin hogar, los inmuebles fueron declarados en perdida total.
La rápida respuesta de la comunidad fue vital en para la atención de la emergencia, los vecinos se unieron para combatir el fuego con baldes de agua, mientras se aseguraba de que los niños residentes fueran evacuados a un lugar seguro. A pesar de los esfuerzos conjuntos, una mascota y varias aves de corral perecieron en el siniestro.
El Cuerpo de Bomberos de Neiva, con diez unidades y dos máquinas, logró finalmente controlar las llamas, evitando una tragedia mayor. Sin embargo, las dos familias perdieron todo lo que poseían, y ahora enfrentan el desafío de reconstruir sus vidas desde cero. Ante esta situación, la comunidad se ha unido en solidaridad, lanzando un llamado urgente de ayuda.
Se ha iniciado una campaña de solidaridad en busca donaciones de enseres de cocina, camas, colchones, estufas, ropa, calzado, y comida no perecedera, entre otros artículos esenciales, y materiales para la reconstrucción de sus viviendas.
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