El exdirector de la Policía Nacional fue detenido por el CTI y trasladado al búnker de la Fiscalía. Deberá cumplir una pena de más de 7 años por intentar frenar un operativo judicial en favor de un empresario.
Redacción Judicial
En una decisión que marca un
hito en la justicia colombiana contra altos mandos de la fuerza pública,
agentes del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) hicieron efectiva la captura
del general en retiro Rodolfo Palomino López, exdirector de la Policía
Nacional.
La detención se produce en
cumplimiento de la sentencia emitida por la Sala Especial de Primera Instancia
de la Corte Suprema de Justicia, que lo condenó a 7 años y un día de prisión
como autor responsable del delito de tráfico de influencias de servidor
público.
Los hechos que hoy envían al
general (r) Palomino tras las rejas se remontan a febrero de 2014. Según
comprobó el alto tribunal, Palomino utilizó su cargo y rango para influir
indebidamente sobre la fiscal delegada ante los jueces del circuito, Sonia
Lucero Velásquez Patiño.
La investigación reveló que
Palomino, acompañado por el entonces director de la DIJÍN, acudió al
apartamento de la fiscal Velásquez. Allí, en una reunión privada, el general
intentó persuadir a la funcionaria judicial para que suspendiera la orden de
captura que estaba vigente contra el empresario Luis Gonzalo Gallo Restrepo.
Contexto sobre Luis Gonzalo
Gallo: El hombre a quien Palomino intentaba proteger, Luis Gonzalo Gallo, es un
empresario y ganadero que estaba siendo investigado por presuntos nexos con el
paramilitarismo, específicamente por delitos relacionados con el desplazamiento
forzado y el despojo de tierras en los departamentos de Córdoba y Antioquia.
La Corte determinó que la
petición de Palomino no solo fue irregular, sino que constituyó una presión
indebida contra la independencia judicial, aprovechando su posición de poder
para favorecer a un tercero.
Tras su captura, el general en
retiro fue trasladado a las instalaciones del búnker de la Fiscalía General de
la Nación en Bogotá, donde se surten los trámites de reseña antes de definir su
lugar de reclusión definitivo.
Sin embargo, la decisión de
privarlo de la libertad de manera inmediata no fue unánime. El magistrado Jorge
Emilio Caldas Vera, ponente de la sentencia, emitió un salvamento parcial de
voto.
Caldas cuestionó la orden de
captura inmediata dictada por la Sala Mayoritaria, argumentando que, bajo el
amparo de la sentencia SU-220 de la Corte Constitucional, se debió respetar el
principio de libertad hasta que el fallo quedara en firme tras la segunda
instancia, permitiendo así que Palomino esperara la ejecutoria de la sentencia
en libertad. A pesar de este argumento garantista, la mayoría de la Sala optó
por asegurar la comparecencia del condenado mediante su detención inmediata.
Esta condena representa el
golpe judicial más fuerte contra Rodolfo Palomino, quien renunció a la
dirección de la Policía Nacional en febrero de 2016 en medio de un escándalo
mediático y disciplinario.
Aunque su salida de la
institución se dio en medio de investigaciones por presunto enriquecimiento
ilícito y el escándalo de la llamada "Comunidad del Anillo" (una
supuesta red de prostitución dentro de la Policía), es finalmente el caso del
empresario Gallo el que lo lleva a prisión. Además de la pena privativa de la
libertad, Palomino ha sido inhabilitado para el ejercicio de derechos y
funciones públicas por el mismo lapso de la condena.
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