Los integrantes de la guardia indígena del Cauca están en
máxima alerta: tienen claro que existe un plan sicarial para asesinarlos.
Por eso, y como lo han hecho desde hace 27 años, los
miembros de esta organización ancestral reforzaron su trabajo comunitario para
enfrentar esa ola de violencia. De paso cumplir su misión de cuidar a sus
comunidades en territorios.
“Existe un plan sicarial para asesinar individualmente a
muchos de nuestros líderes y guardias”, aseguró Yesid Conda, consejero mayor
del Consejo Regional Inígena del Cauca, Cric, al exponer que está en marcha los
planes para protegerse.
Esta situación se da en medio del recrudecimiento de la
guerra en el Cauca, donde guerrilleros del ELN, la Segunda Marquetalia y las
disidencias de las Farc se enfrentar a muerte por controlar amplias zonas del
departamento del Cauca.
De ahí que ellos, la guardia indígena tiene la compleja
tarea de proteger los territorios ancestrales donde están asentadas sus
comunidades. Sí, tiene miedo, pero como reza el himno que los representa, “por
cada indio muerto, otros miles nacerán”.
“Este año llevamos 27 ataques, nos estamos preparando
para hacer frente a todas estas amenazas, sin perder de vida nuestra misión, la
cuidar la vida y el territorio, todo a partir de nuestras dos armas poderosas:
la palabra y el bastón de mando”, agregó Yesid Conda.
Aunque el panorama es de muerte y violencia, para la
guardia indígena es claro que la pelea es por conservar la vida frente a
cualquier adversidad, más cuando se cumple 53 años de fundación de la
organización mayor que las agrupa: el Consejo Regional Indígena del Cauca,
Cric.
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